En Sudamérica y particularmente en Uruguay, el arte urbano está asociado a reivindicaciones políticas o a vínculos futbolísticos. En Argentina el arte callejero no siempre fue aceptado ya que se fueron haciendo distintos proyectos y tareas para conseguir el apoyo de las autoridades y lograr llevar adelante el nuevo proyecto de embellecer la ciudad.
En las paredes de la Ciudad de Buenos Aires muchos artistas callejeros han expresado su voz a través de la palabra y/o imagen para de alguna manera darle color y alegría al barrio a través de sus obras de arte urbano. Lo mismo sucede con la ciudad de Corrientes Capital en la cual a lo largo y a lo ancho de sus paredes se pueden hallar grafitis, que sirven para dejar una marca o nombre del artista y que generalmente es relacionado con el vandalismo.
En el diccionario de los graffiteros; los taggs son simplemente una firma hecha con un solo color, realizada lo más rápido posible con marcador o aerosol. La bomba también es una tipografía con aerosol a dos colores, generalmente negro y plateado. La pieza vendría a ser una tipografía bien definida, compleja y con varios colores.
Los esténcils se realizan con un acetato cortado, generalmente como el que usan las radiografías, creando así una plantilla con la forma deseada en la que se utiliza aerosol en la pared. Esta técnica permite intervenir varios murales en poco tiempo ya que los dibujos suelen ser de un solo color y no muy grandes.
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